El movimiento por la vivienda en Barcelona, formado por sindicatos y grupos de varios barrios de la ciudad, ha acusado este lunes al gobierno local, liderado por Jaume Collboni, de «dejar familias en la calle» y «evitar la rehabilitación de barrios enteros mientras promueve grandes eventos como la Copa del América».
«Son unas políticas dirigidas a satisfacer los intereses de empresarios y macroproyectos, y que empeoran las condiciones de vida y expulsan a las vecinas», ha afirmado un representante del Sindicato de Vivienda del Raval, en una rueda de prensa ante el ayuntamiento.
Estos colectivos exigen que se detengan todos los desahucios de titularidad municipal, se expropien los pisos vacíos, se regularicen los públicos y se ponga fin a la «represión contra el movimiento por la vivienda».