La consellera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, Sílvia Paneque, y la alcaldesa de Gavà, Gemma Badia, han firmado este sábado un convenio para impulsar la construcción de 417 viviendas protegidas. El acuerdo establece la cesión al Incasòl de unas fincas municipales de 32.000 m² en el futuro barrio de Canyars Sud, junto a la C-245, para la edificación de estas más de 400 viviendas de alquiler asequible. «La vivienda no había sido nunca un problema tan grave y tenemos que garantizar este derecho fundamental, con la construcción de vivienda asequible y con otros instrumentos como los topes del alquiler y el fomento de la rehabilitación», ha señalado Paneque, durante su visita institucional al Ayuntamiento de Gavà.
«Ante este reto somos muy conscientes de que tenemos que actuar de la mano de los ayuntamientos. Y quiero agradecer el compromiso de Gavà con las políticas de vivienda del Gobierno para empezar a trabajar para hacer realidad estas 400 nuevas viviendas, 400 nuevos proyectos de vida que contribuirán a seguir construyendo Gavà», ha añadido la titular de Territorio. «Generar tantas viviendas protegidas es un reto colosal y continuamos trabajando y explorando todas las vías con la colaboración de los ayuntamientos para acortar también el déficit de alquiler asequible», ha insistido Paneque, que ha estado acompañada del secretario de Territorio, Víctor Puga, y el director de Vivienda y Edificación del Incasòl, Jordi Salvat.
«Estas promociones nos permitirán atender la demanda existente en Gavà y las necesidades de las familias y de diferentes colectivos, sobre todo los más jóvenes, que queremos que sigan viviendo en nuestra ciudad y no tengan que marcharse por no poder acceder a una vivienda», ha puntualizado la alcaldesa Gemma Badia. «El conjunto del sector, que prevé que el 40% de los pisos sean de promoción oficial, será una oportunidad para mucha gente, los 3.700 demandantes de pisos asequibles en Gavà y las 700 personas que pidieron acceder a la última promoción de Can Ribes y quedaron fuera», ha concluido Badia.