El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha hecho un llamamiento a «el entendimiento, el diálogo y la fraternidad» en el marco del discurso institucional por Sant Jordi.
«Tenemos un futuro por delante que queremos vivir como vivimos la Diada: con optimismo y esperanza», ha afirmado el presidente durante la declaración institucional, hecha desde el Pati dels Tarongers del Palau de la Generalitat.
En esta línea, ha pedido «proyectar Sant Jordi más allá de las fronteras» porque el mundo «necesita un mensaje de optimismo y de fraternidad». Además, Illa ha señalado que no hay gesto más revolucionario en contra del odio y a favor del conocimiento, el progreso y la educación que regalar rosas y libros.
Illa ha centrado gran parte de la declaración institucional en la situación geopolítica y la ha enmarcado en un contexto de «cambios profundos» que asegura que Cataluña «afronta en un buen momento para el país». El presidente ha remarcado que se está «reforzando las fortalezas» de Cataluña para poder resolver con garantías «los escenarios de incertidumbre».
Según el presidente, cada 23 de abril Cataluña «muestra al mundo su mejor versión», que ha calificado de «cívica, dinámica y alegre». Precisamente por ello, ha pedido «proyectar» la Diada más allá de las fronteras.
«Quizás algunos se vanaglorían de la fuerza o del dinero, nosotros de regalar rosas; porque no hay gesto más revolucionario contra el odio que regalar una rosa a quien creemos y también a quien piensa diferente que nosotros. Quizás algunos se vanaglorian de atacar la ciencia, las universidades y el arte, nosotros de regalar libros; porque no hay gesto más revolucionario a favor del conocimiento, del progreso y de la educación que abrir un libro», ha sentenciado Illa.
Durante el discurso, el presidente ha defendido la lengua catalana y ha asegurado que el país está «haciendo nuevos avances» en el reconocimiento del catalán a las instituciones europeas. Además, ha garantizado que se seguirá fomentando su uso en todos los ámbitos.
El presidente también se ha referido a la leyenda de Sant Jordi y ha asegurado que la batalla entre el caballero y el dragón recuerda «el deber de luchar contra las injusticias sociales y las desigualdades». Illa ha aprovechado para recordar, también, que la Diada celebra «el Sant Jordi mártir que se negó a perseguir a los cristianos en el siglo IV a pesar de las órdenes del emperador Diocleciano». Además, Illa ha pedido no olvidar el sufrimiento que se vive tanto en Gaza como en Ucrania y ha exigido un alto el fuego que «ponga fin a la tragedia».
Locura al Papa Francisco
Además, Illa también ha hecho mención a la muerte del Papa Francisco y ha reiterado el condolencia del Gobierno, ya que ha asegurado que en Cataluña era «muy estimado y escuchado» porque «ejerció un liderazgo moral más allá de las creencias religiosas». «Su legado para la comunidad cristiana y para el conjunto de la humanidad es inmenso: nos recuerda el compromiso ineludible de situar a las personas más vulnerables y el cuidado del planeta en el centro de nuestra acción colectiva», ha afirmado el presidente.