Pues, sí. Joel Díaz lo puso en duda en la red X donde, el 12 de marzo, escribió un post con el siguiente texto: «El tiempo pasa muy rápido y ya hace 5 meses que la @orriolsderipoll decidió tergiversar una broma que hice en @LaSotana_ sobre el nombre de su hija, Violant, para montar una campaña delirante de frivolizar con la pederastia y la violencia de género». Hizo todo un hilo de mensajes donde destacaba que el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC) había estudiado el caso y que no había encontrado nada punible. «La denuncia penal todavía la espero, 5 meses después. Y no creo que llegue nunca porque la única intención de la diputada Orriols era hacer eso que en inglés se llama SLAPP» (demanda de intimidación de la participación pública).
Sílvia Orriols le contestó el mismo día con otro post en X que incluía una copia de parte de la querella que va dirigida no sólo a Joel Díaz sino también a dos miembros del equipo del podcast de La Sotana: Andreu Juanola y Magí García. De la querella queda excluido el cuarto miembro del equipo que hace este podcast, Manel Vidal, que no intervino en el gag donde Díaz bromeó sobre la hija de la alcaldesa de Ripoll.
La «campaña delirante» te espera en los juzgados escribió Orriols.
