China apunta a una expansión de su economía de alrededor del 5% en 2025, según el Informe sobre la Labor del Gobierno. Este informe, presentado en la sesión anual de la XIV Asamblea Popular Nacional para su deliberación, también esboza otra serie de objetivos clave de desarrollo para este año, entre ellos una tasa de desempleo urbano calculada en un 5,5%, la creación de más de 12 millones de nuevos puestos de trabajo urbanos y un alza del índice de precios al consumidor en torno al 2%.
El país logró un crecimiento económico del 5% en el año 2024, impulsado por un paquete de políticas de gran impacto, junto con otras medidas favorables al crecimiento, que contribuyeron a alimentar un fuerte dinamismo económico. En el escenario internacional, una tasa de incremento en torno al 5% sitúa a China entre las principales economías de más rápido crecimiento del mundo, con un aumento económico equivalente a la producción anual de una nación de tamaño medio.
Huang Qunhui, del Instituto de Economía de la Academia de Ciencias Sociales de China, califica el objetivo de crecimiento económico de este año de científicamente fundamentado y realista. «Ante un difícil entorno mundial, la meta proactiva y resiliente sugiere que China está afrontando las incertidumbres con un enfoque claro y decidido de crecimiento», afirma.
Dado que 2025 es el último año del XIV Plan Quinquenal (2021-2025) y un momento crucial para la elaboración del próximo proyecto quinquenal, los observadores consideran que las políticas gubernamentales no solo impulsarán este año un crecimiento sostenible, sino que establecerán también las bases para el impulso de la modernización del país a largo plazo.
Promover el desarrollo de alta calidad constituye un enfoque clave en la agenda del Gobierno, con prioridades que van desde el estímulo de la demanda interna hasta el desarrollo de nuevas fuerzas productivas de calidad. Se adoptará un enfoque centrado en las personas y se prestará más atención en la política económica para mejorar el nivel de vida y estimular el consumo.
La demanda interna será, este año, la principal fuerza motriz y el ancla del crecimiento económico. Se emitirán bonos especiales del Tesoro a plazo extralargo por 300.000 millones de yuanes, con la finalidad de apoyar el recambio de bienes de consumo usados por nuevos.
Asimismo, se fomentarán las nuevas fuerzas productivas de calidad. China tiene como objetivo promover las industrias emergentes y del futuro, como la tecnología cuántica y la economía de baja altitud (drones, vehículos aéreos…), acelerar la actualización de las industrias tradicionales y combinar las tecnologías digitales, incluida la IA, con los puntos fuertes de la manufactura y el mercado.
