Víctor Terradellas, el ex responsable de Relaciones Internacionales de Convergència Democràtica de Catalunya que llevó a dos emisarios rusos al Palau de la Generalitat para que se reunieran con Carles Puigdemont horas antes de que proclamara la independencia de Cataluña. Terradellas ha sido apartado de la primera línea de Junts per Catalunya y parece que sus relaciones con Puigdemont han empeorado. Lo que no ha cambiado es su idea sobre que cualquier apoyo internacional a la independencia de Cataluña es bueno, venga de donde venga.
El pasado domingo, Terradellas escribía este post en X: «Que vaya alerta la UE con las decisiones que tome porque defendiendo como defiende a Zelensky, que se nos ha vendido como un demócrata cuando él mismo homenajeaba a personajes como Kotsyubail, líder del partido nazi e instigador del mal que ahora sufrimos, asesinando a jóvenes rusos en Odessa. Si hoy la UE, como ya decía yo hace más de una década, no tiene ni voz ni voto en el mundo, si las cosas van por el mal camino, lo que nos puede pasar será el desastre. Hay quienes, aparte de jugar a político sin serlo, quieren hacer de analistas internacionales y en este caso valdría más que no dijeran ni pío. Cataluña debe hacer su camino y buscar alianzas convenientes para este nuevo orden y dejar, también, de hablar de nuestro mundo. Un mundo, un sistema de vivir que está desgarrado, roto y que ya no queda nada de lo que tuvimos, en parte, algún día».
De los dos rusos que se reunieron con Puigdemont en octubre de 2017 de la mano de Terradellas uno está muerto y el otro está desaparecido. Habrá que buscar otros interlocutores para hacer las «alianzas convenientes» que reclama el introductor de emisarios del Kremlin en el Palau.
