En 2024 se registraron 266 alertas de ataques físicos, intimidación, detención y otras acciones «restrictivas» sobre periodistas, según el informe anual elaborado por la plataforma del Consejo de Europa para la protección y seguridad del periodismo.
Los datos, publicados este miércoles, reflejan que el número de alertas recogidas es inferior al de 2023 (285), aunque la cifra se mantiene «solo por encima» de los niveles previos a la pandemia de la covid-19. La mayoría de ellas, un total de 32, se produjeron en territorios ocupados por Rusia y fueron atribuidos a fuerzas rusas.
En el informe, denominado 2024: Confrontando la presión política, la desinformación y la erosión de la independencia de los medios, el Consejo de Europa también alerta de la «creciente amenaza» de la desinformación a través de los contenidos generados por la inteligencia artificial (IA) y la propaganda estatal.
Este trabajo hecho público por el Consejo de Europa señala que los peligros a los que deben hacer frente los periodistas que cubren la agresión militar de Rusia sobre Ucrania siguen siendo «la mayor preocupación» relacionada con la seguridad de los periodistas en Europa en 2024.
Aparte de Rusia, la mayoría de las alertas recogidas por el informe se atribuyeron a Turquía (28), Serbia (20) y Georgia (18). Precisamente, sobre Georgia, el Consejo de Europa indica en su informe que el país registró más del triple de incidentes que el año anterior debido principalmente a los ataques a periodistas durante las protestas a favor de la Unión Europea.
Del total de alertas, 78 estaban relacionadas con atentados contra la seguridad y la integridad de los trabajadores del sector, incluidas las muertes de la periodista ucraniano Viktoria Roschyna mientras se encontraba bajo custodia rusa, el periodista de Reuters Ryan Evans y el periodista de Kazajistán Aidos Sykov.
El informe también apunta que, más allá de los actos de guerra provocados por la agresión de Rusia contra Ucrania, la mayoría de agresiones físicas a periodistas estaban relacionadas «con su cobertura de manifestaciones públicas y elecciones».
Además, indica que a 31 de diciembre de 2024 había 159 periodistas detenidos en toda Europa, 44 de ellos en Bielorrusia, 30 en Azerbaiyán, 29 en Rusia, 28 en los territorios ocupados por Rusia en Ucrania, 27 en Turquía y uno en Georgia.
El caso de España
El informe, de 70 páginas, cita en dos ocasiones a España. Por un lado, destaca que España y otros Estados miembros han dado «pasos» para abordar las amenazas políticas sobre los periodistas y menciona, concretamente, el caso de la periodista de eldiario.es Esther Palomera, que, según denunció su medio, recibió presiones del jefe de gabinete de Isabel Díaz Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez. En cuanto a este caso, el informe destaca que la portavoz del gobierno español, Pilar Alegría, «censuró y condenó» las amenazas a Palomera.
Por otro lado, el informe menciona a España para alertar de que los representantes de los trabajadores de las grandes organizaciones «no son siempre adecuadamente consultados» durante las grandes reformas que afectan «significativamente» a la financiación y la gestión de los medios de comunicación.
Así, el informe hace referencia a la reforma de la gestión de Radio Televisión Española (RTVE) a raíz del decreto aprobado por el gobierno español el 22 de octubre de 2024, que reducía la mayoría necesaria para la renovación del consejo de administración de RTVE de dos tercios a la mayoría absoluta en la segunda vuelta para hacer los nombramientos.