El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha reafirmado su compromiso con una paz justa y duradera en Ucrania, rechazando la imposición de acuerdos sin la participación de los ucranianos y europeos. Durante el Congreso del PSOE en Castilla y León, ha advertido contra la «ley del más fuerte» y ha subrayado la importancia del respeto al derecho internacional y la integridad territorial. También ha señalado que someterse al agresor solo generaría más conflictos y ha criticado las ambiciones expansionistas de líderes autoritarios como Vladímir Putin.
Sánchez ha vinculado la ultraderecha con intereses económicos y estratégicos que buscan debilitar la democracia, acusando al Partido Popular de mantener vínculos con estos sectores en lugar de adoptar una postura firme como otras derechas europeas. En este contexto, ha mencionado la reunión de la ultraderecha en Washington, donde figuras como Steve Bannon y Elon Musk habrían mostrado su influencia en los procesos electorales mediante el uso de algoritmos y campañas digitales. Frente a ello, ha defendido el poder del voto como la herramienta esencial para fortalecer la democracia.
El líder socialista ha criticado duramente al presidente argentino, Javier Milei, señalando que su discurso populista esconde intereses privados que buscan lucrar con los servicios públicos. Ha calificado a la ultraderecha de «estafa piramidal» en la que unos pocos se benefician a costa de la mayoría y ha insistido en que la izquierda tiene la responsabilidad de frenar esta ola reaccionaria en las urnas. En su intervención, ha reafirmado su apuesta por el progreso social a través del Boletín Oficial del Estado, asegurando que sus adversarios políticos «detestan el éxito» de las políticas progresistas.