El presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa, ha avisado de que no permitirá que «el acceso a la vivienda siga siendo el primer factor de desigualdad social«. Así lo ha dicho este martes en la comisión interdepartamental de la Vivienda, coincidiendo con la aprobación de la primera convocatoria pública de reserva de solares cedidos por los ayuntamientos para hacer pisos de protección oficial.
Salvador Illa ha recalcado que «no va de catalanes de primera y de segundo como, desgraciadamente, se ha escuchado últimamente» y que con la puesta en marcha de la iniciativa se hace un «paso de gigante» en esta materia. El presidente del Govern ha afirmado que esta problemática «se resuelve con medidas ambiciosas y rigurosas y no con demagogias y populismos».
Illa ha recalcado que «la vivienda es un derecho y no un negocio» y que debe ser «para vivir y no para especular». El presidente catalán ha recordado que esta primera convocatoria de parcelas municipales conservarán para siempre la calificación de vivienda social y que un mínimo de un 25% irán destinados a jóvenes y hasta un 10% a personas vulnerables o personas mayores. El presidente del ejecutivo catalán ha señalado que se está en camino de una producción anual de 4.400 pisos anuales, cuando se venía de hacer 259.
Por otro lado, Illa ha explicado que el siguiente paso será «modificar la ley de urbanismo» con el fin de que se pueda construir «más rápido» y de esta manera, «aumente la edificabilidad». Todo ello, para contribuir «al reto» de alcanzar los 50.000 pisos marcados por el Gobierno.