El presidente de la patronal catalana Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, ha afirmado este miércoles que «desde una perspectiva lógica» los trabajadores que cobran el salario minimo interprofesional (SMI) deberían seguir quedando exentos de tributar el IRPF. «El gobierno podría haber estado más acertado, ya que hablamos de clases trabajadoras que perciben menos salarios», ha comentado en una entrevista en RNE.
«Los empresarios somos pragmáticos, veremos qué decide finalmente el Congreso de los Diputados», ha añadido el presidente de Foment del Treball, que, por otra parte, ha añadido que espera que la reducción de la jornada laboral «descarrile» en la cámara baja y la medida se negocie en el marco de la negociación colectiva.
En relación con el desacuerdo entre las dos fuerzas políticas del ejecutivo español exhibido ayer en público tras la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre la tributación del SMI, Sánchez Llibre ha afirmado que «esta señora (la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz) va bastante por libre y plantea iniciativas que no están pactadas con el gobierno y ahí está la gran disfunción que perjudica la imagen del gobierno y de lo que se está llevando a la ley». debería ser la negociación colectiva, que en los últimos 45 años ha dado grandes resultados a la economía española».
En la entrevista en RNE, Josep Sánchez Llibre ha explicado que la patronal española CEOE planteó un aumento del SMI del 3,5%, que el gobierno descartó. «Ella (Yolanda Díaz) lo rechazó porque siempre quiere ir un paso más allá, siempre planteando esta división», ha apuntado el también vicepresidente de la patronal española.
Sobre la reducción de la jornada laboral, el presidente de la patronal catalana ha señalado que en Cataluña alrededor del 35% de los convenios van en la dirección de jornadas 37,5 horas o inferior y ha negado que esté en contra de esta medida, si no que quiere que se trate en la mesa de la negociación colectiva y no se imponga por ley. Sánchez Llibre ha admitido que desea que esta reforma no prospere en el Congreso de los Diputados y que los empresarios harán de «lobby» a los partidos políticos para influir en su posicionamiento.
Además, ha destacado que la ministra de Trabajo quería que esta medida ya estuviera en marcha en 2025 y que Díaz «ya ha fracasado». «Ya hemos ganado el primer round, planteó iniciativas que no podían prosperar desde ningún punto de vista», ha sentenciado.