El pelotón de contrapropaganda organizado por la anterior dirección de Esquerra Republicana continúa provocando dolores de cabeza. Oriol Junqueras, que siempre ha afirmado con vehemencia que no sabía nada de esta estructura B, ganó la batalla por la renovación de la cúpula del partido con la promesa de que iría hasta el fondo de este escabroso episodio, que tuvo, entre otras víctimas, el excandidato de ERC por Barcelona Ernest Maragall.
Tras recuperar el cargo de presidente, Oriol Junqueras cesó al responsable de Cumplimiento de ERC, Xavier Mombiela, que era el encargado de la investigación interna sobre el escándalo de la estructura B. En su lugar ha sido designado Lluís Mombiela –sin ninguna relación de parentesco con el anterior–, que ahora deberá redactar el informe definitivo sobre esta célula de contrapropaganda y enviarlo a la comisión de garantías para que adopte las medidas que considere oportunas.
El anterior responsable de Cumplimiento, Xavier Mombiela, ha señalado que su investigación involucraba a cargos de la actual dirección del partido, que forman parte del núcleo de confianza de Oriol Junqueras. ¡Menudo lío!