Una avería en uno de los dos pozos que hay en Port de la Selva (Girona) ha dejado sin agua potable y con un suministro intermitente a todo el pueblo. Los vecinos notaron que la presión del agua bajaba este lunes al atardecer y, poco después, el gobierno local avisó de un corte indefinido mientras buscan una solución. De momento, se pide a la gente que no use agua del grifo ni para cocinar ni para beber porque hay una concentración de sal más elevada de lo habitual.
Desde este lunes por la noche, los habitantes del Port de la Selva se han quedado sin agua. El motivo es una incidencia que ha habido en uno de los dos pozos que dan agua al municipio, hecho que hace que el pueblo tenga solo la mitad del agua que se consume en plena temporada alta y, por lo tanto, el suministro de agua no es regular. Hay vecinos que aseguran que tienen un hilo de agua que les sale del grifo, otros pueden llenar la cisterna del váter y otros no tienen agua de ninguna de las maneras.
Por eso, muchos se han espabilado y han ido hasta la playa para llenar garrafas, cubos y botellas de agua. En paralelo, otros muchos han ido hasta el supermercado para llevarse botellas y garrafas. De hecho, a media mañana el supermercado se ha quedado sin stock y todo el pasillo ha quedado vacío. Tan solo había un solo estante con algunas botellas, eran las de 50 cl y las que tienen sabor a limón.
La empresa concesionaria del servicio, Agbar, ha avisado de que habrá un suministro intermitente mientras no se resuelva la incidencia. De momento, el gobierno local y Agbar trabajan con el Consorcio de Aguas de la Costa Brava.
