La CUP se ha quedado con la presidencia y la portavocía del grupo mixto del Parlamento de Cataluña, mientras que la Mesa de la cámara ha acordado que el portavoz adjunto sea de Aliança Catalana (AC). Al no llegar a los diputados mínimos para configurar un grupo propio y no haberse alcanzado un acuerdo entre ambas formaciones, la Mesa ha acabado decidiendo la distribución.
La CUP había propuesto quedarse con los tres cargos, mientras AC reclamaba tener el portavoz. Se trata de una situación temporal, ya que la reforma del reglamento del Parlamento catalán que se votará este jueves, y que previsiblemente saldrá adelante gracias a los votos favorables de PSC, Junts, ERC, comunes y CUP, permitirá a los cuperos tener grupo propio, si un partido les cede diputados temporalmente.