La Audiencia de Girona ha amnistiado el activista a quien juzgaron para descolgar la ‘rojigualda’ de la sede de la Generalitat durante el primer cumpleaños del 1-O.
El tribunal lo absolvió del delito de ultraje a la bandera, pero sí que lo condenó por un delito de desórdenes públicos, por formar parte del grupo de 300 personas que aquel día irrumpió a la delegación del Govern.
Ahora, la Sección Cuarta de la Audiencia ha emitido una ejecutoria, donde revisa la causa, y concluye que los hechos se enmarcan dentro de los supuestos que recoge la ley de amnistía porque se aplique la medida de gracia.
«En vista de que los hechos se hicieron en el contexto de las protestas para conmemorar el 1 de Octubre […] procede decretar la amnistía», recoge el escrito.