Figuras de Junts y de la CUP del calibre del expresidente y candidato juntista el 12-M, Carles Puigdemont, y la cabeza de lista cupera, Laia Estrada, han dado la bienvenida, desde X, al cantautor y exdiputado de Junts pel Sí Lluís Llach como nuevo presidente de la ANC.
También lo ha hecho la expresidenta de la ANC Carme Forcadell, pero no, en cambio, el candidato de ERC el 12-M, Pere Aragonès, ni el líder de ERC, Oriol Junqueras, que desde la misma red social, en cambio, ha felicitado a la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum.
La elección de Llach, por otra parte, ha provocado el rechazo de determinadas figuras del independentismo duro, en particular de la órbita de Aliança Catalana, partido que el nuevo presidente de la ANC ha tachado de fascismo con estelada.
Fuera de la política de partido, ha destacado la reacción de otro exdiputado, Antonio Baños, que no sólo ha anunciado este sábado que vuelve a apuntarse a la ANC, sino que ha publicado en X una captura de pantalla para acreditar que ya ha tramitado su alta como socio. «Vamos. Volvamos. A las órdenes, presidente», ha escrito.
Este exrepresentante de la CUP en el Parlamento catalán y exdirigente de la ANC se presentó en anteriores elecciones a liderar la plataforma, pero fue vetado una vez por incumplimiento del reglamento interno, y en 2020 quedó segundo, superado por Elisenda Paluzie.