Los campesinos han reactivado este lunes las protestas para hacer oír su voz en Europa en plena campaña electoral. Varios tractores han bloqueado desde las 10 de la mañana los principales pasos fronterizos que comunican con Francia. Los agricultores, en concreto, han cortado la AP-7 en La Jonquera, la C-38 en el Coll d’Ares (Ripollès), la N-152 en Puigcerdà, la N-145 en la Seu d’Urgell y la N-230 en Bossòst (Valle de Aran).
Convocada por Revolta Pagesa, la protesta cuenta con el apoyo de varias asociaciones agrarias de toda España y también de los agricultores franceses, y está previsto que se alargue durante 24 horas. Los campesinos reclaman mayor seguridad alimentaria sobre los productos importados, priorizar los locales y menor presión fiscal sobre las energías.
Sobre las ocho de la mañana, los tractores habían salido desde varios puntos para dirigirse hacia las fronteras. El corte más tempranero ha sido en el corte en La Jonquera, difunde la ACN. Una cuarentena de tractores han subido desde Figueres y sobre las 9.30 horas ya han cortado la AP-7 en sentido norte, provocando desvíos hacia la N-II y la A-2. En este punto también apoyan agricultores franceses que han pernoctado en Perpiñán.
El Servicio Catalán de Tráfico también ha informado que en el Coll d’Ares se ha cortado la circulación sobre las 9.45 h de la mañana. En la Seu d’Urgell, desde las 9.30 h, aproximadamente, los tractores han provocado circulación con congestión a la altura de la Ribera de Urgellet, añade la misma información.
El sector ha vuelto a las carreteras tras las protestas de febrero, que colapsaron las principales vías de comunicación varios días. Esta vez, el sindicato Unió de Pagesos, que tiene la representación mayoritaria en Cataluña, se ha desmarcado porque no ve «legítimo» el movilizarse en plena campaña por las elecciones al Parlamento Europeo.
