Desde que anunció que se presentaba como jefe de cartel de Junts x Catalunya (JxCat) a las elecciones en el Parlament, Carles Puigdemont abandonó su mansión de Waterloo para trasladarse a la Cataluña Norte. Oficialmente, el candidato instaló su cuartel general en Argelers, pero también disponía de una residencia a 30 kilómetros, en la comarca del Vallespir, para ir a dormir. Se trata de la casa rural Che Villargeil, ubicada cerca de Ceret, en el pie del Canigó. El precio de alquiler de esta antigua masía restaurada, con capacidad para 12 personas, es, en esta época del año, de 1.850 euros por semana. Dispone de jardín, piscina, gimnasio, billar… A partir de este lunes día 20 ha quedado disponible, hecho que indica que Carles Puigdemont ha decidido volver a Waterloo.
