La Junta Electoral Provincial de Barcelona ha desestimado el recurso que presentó Junts, aduciendo la existencia de «irregularidades», para repetir el voto exterior del 12-M. La formación de Carles Puigdemont, en concreto, consideró que existía diferencia entre el voto exterior (CERA) emitido y el escrutado debido a una destrucción de las papeletas.
La Junta Electoral lo ha desmintido, comunicando que «es rotundamente falso», y ha afirmado que el voto no fue destruido, sino que está custodiado por los Mossos d’Esquadra. El órgano electoral ha aclarado también que la diferencia entre los votos emitidos y los escrutados se debe a los votos que no pueden ser dados como válidos.
Además, ha desestimado otro recurso con el que Junts manifestaba su malestar porque, durante el recuento del voto exterior, aseguraba que los apoderados habían sido «retenidos». La Junta Electoral ha respondido que los apoderados pudieron moverse «con la libertad que permitía la zona de escrutinio» y también ha asegurado que es falsa la denuncia de Junts relativa a la rapidez con la que se hizo el escrutinio del voto CERA.
