Cinco mujeres activistas han presentado una querella por abusos sexuales contra el Policía Nacional que se habría infiltrado en movimientos sociales e independentistas en Barcelona. En un escrito presentado en el juzgado, también atribuyen al agente delitos de torturas, descubrimiento de secretos y contra los derechos civiles.
Entre 2020 y 2022, el policía habría mantenido una relación con estas mujeres con el fin de introducirse en estos colectivos y conseguir información sobre ellos.
La abogada Sònia Olivella considera que los hechos son muy graves y asegura que la conducta de ese agente podría suponer un delito de tortura. «Se ha atentado directamente contra la dignidad y la integridad moral de las querellantes, con graves impactos psicosociales y con una intención de castigar a estas mujeres».
Las abogadas recuerdan que la infiltración de policías sólo está legalmente justificada cuando se hace en casos de crimen organizado o terrorismo y siempre con una autorización del juez. En cuanto al delito de abuso sexual, la abogada de CGT Laia Serra dice que, en este caso, el consentimiento estaba viciado.